Carta de una mujer maltratada.

Resultado de imagen para separadores web
(Escucha la canción mientras lees la carta, si así lo deseas)


No sé en que momento deje que todo esto pasara. Ni siquiera se en que momento comenzó todo, solo recuerdo que eramos felices ¿Verdad? Lo eramos... o eso quería creer, aparentar... ya no lo sé.

Te amaba... y me amabas, me lo decías. 

Recuerdo cuando te conocí, un hombre elegante, todo un caballero, realmente educado, enamoraste a mis padres, a mis amigos y sobre todo a mi, con tu dulzura y todas tus atenciones. 
Sí, tenías a veces malas actitudes, conocí tu fuerte carácter y la poca tolerancia que tenías, pero otras veces eras todo un sueño, lo cual para mi tenía más peso que todo lo demás y accedí casarme contigo aceptando todos tus defectos, pero yo ingenua e ilusa creí que con mis besos y abrazos podría llegar a cambiarte, a alegrar tu día, tu vida... yo cada mañana te haría tu almuerzo favorito, te tendría tu ropa lista, y nunca te haría dudar de haberte querido casar conmigo. 

Pero cada día era más difícil hacerte reír, tu mal humor era constante, comenzaste a gritarme por todo, a exigirme tener todo ordenado y tu ropa impecable, a los minutos desesperadamente... me pedías perdón y me convencías de que no iba a volver a suceder... pero se repetía.

Un día llegaste tarde del trabajo,mal humorado, creí que abrazarte sería buena idea... Error, furioso me empujaste contra la pared, golpeándome en la cabeza... Al verme allí tirada y con lágrimas, arrepentido y llorando me exigías mi perdón, y te excusabas diciendo que el estrés de la oficina era muy grande.
" Era mi culpa, soy tan torpe, no debía molestar" Pensé...  

Los celos cada día eran más fuertes, pero yo confiaba que era por que amabas y no soportabas que alguien más me mirara. 

Los "tontita" y "boba" se fueron convirtiendo e imbécil, estúpida e idiota. Los empujones cada vez se hacían golpes, cachetadas y patadas. Pero al otro día... me traías flores. 
Te encargabas de hacerme creer que yo valía muy poco, nadie más podría quererme y que era muy afortunada de tener a alguien como tu a mi lado. 

Lo creí... En el espejo, mi reflejo solo era basura, mi ropa se veía mal, mi cabello se caía más y más, mis huesos eran más evidentes.

Me hacías cubrir mis moretones con maquillaje... pero cada vez me costaba más cubrir aquel tono violáceo. 

Debes en cuando te convertías en el hombre perfecto y me permitías dormir entre tus brazos... pero eran más los días de gritos y encierros. 
¿Pero como iba a dejarte? ¿Qué iban a decir de mi? Mi madre tan entregada a la iglesia no me perdonaría romper mi juramento ante el altar, nadie me forzó a casarme, lo decidí yo, ¿Con que cara iba a deshacer esto?

Una tarde... te dije que estaba embarazada... y fuiste ese día el hombre más feliz del mundo, te arrodillaste y dijiste que serías el mejor padre, que todo iba a cambiar de ahora en adelante, y así fue.... Solo un par de semanas.

Un Lunes me llegaron rosas, eran de Daniel, mi primo de California, me felicitaba por el bebé. Llegaste a la casa y apenas iba a decirte quien me las enviaba y las lanzaste a mi cara... 
De ahí no recuerdo nada, solo de pronto estaba en el coche y me repetías: -¡DI QUE FUE UN ASALTO! ¿ENTENDISTE?- 
Asiente con la cabeza y cerré mis ojos esperando morir.

Desperté aquí, en una cama de hospital, no puedo ver bien y me cuesta mucho respirar, escuché que tenía 3 costillas fracturadas y una provocó que mi pulmón colapsara, me duele el abdomen, me duele tanto...
Logré escuchar a mi mamá llorar, dijo que eran gemelitas... ¡Las había perdido! y no solo eso, ya jamás podría volver a tener hijos.

Soy una cobarde... Todo fue mi culpa, si tan solo hubiera hablado antes.


En México cada día mueren al menos 5 mujeres por violencia de género.
El 80% de todas las mujeres sufrirán de violencia de género 
al menos una vez en su vida.


Comentarios

Entradas populares